Por Jack Keogh, Director, Keogh & Associates Consulting, LLC
Descubrí Facebook hace un par de años cuando recibí una invitación para ser “amigo” de la joven sobrina de mi socia en México. Acepté la invitación y, para mi sorpresa, unos veinte minutos más tarde, me llego un mensaje de mi hija – quien egresó de la universidad hace unos 3 años – diciendo “Papá, sal de Facebook – es para universitarios, no para personas de tu edad!” En ese momento, Facebook sólo tenia 12 millones de miembros. Mi hija se quejaba que el sitio, diseñado originalmente para estudiantes universitarios, ha sido secuestrado por los adolescentes.
Primero reflexioné sobre el grado de conexión que han logrado los jóvenes. ¿Cómo se dió cuenta mi hija, trabajando en Nueva York, que yo me habría inscrito en Facebook respondiendo a la invitación de una joven mexicana? ¡Apenas habían pasado 20 minutos! No me deje intimidar y permanecí con mi nuevo perfil en Facebook. Pensé que un perfil más pudiera complementar mi “presencia” en el Internet: sitio de web, blog, y perfiles en LinkedIn, Plaxo y ZoomInfo. ¿Has pensado como te pueden servir estos sitios de conexión social, sobretodo en tiempos de recesión económica?
En tiempos difíciles es útil estar en contacto con el mayor número de contactos sociales y profesionales como sea posible. Renovar y ampliar tus contactos con tus compañeros de trabajo, de la universidad, incluso de tu infancia es una excelente manera de unirte a la revolución digital – en el caso improbable de que todavía no te has unido. Voy a compartir contigo un método rápido y sencillo que utilizo para la investigación de contactos…